viernes, 17 de abril de 2009

Lombardo Mautino recibe reconocimiento de autoridades argentina

Inés Pérez Suárez, ex diputada de la Nación Argentina, durante la recepción de bienvenida que se le hizo a Lombrado Mautino, alcalde de Huaraz dijo que lo felicitaba admiraba porque no siempre los intelectuales se comprometen con la cosa pública, y la política, como la más excelsa de las actividades si se la realiza con pasión."Podía usted haber quedado en la asepsia de lo científico, sin embargo va a someterse al voto popular entre los suyos que lo conocen y lo reconocen. Desde mi condición de historiadora lo admiro y desde mi condición de política secretamente lo envidio" señaló la ex diputada. Asimismo hizo un brindis por el ingeniero y un brindis por la unión permanente de Argentina y Perú

Orquesta limeña La Novel estuvo en Buenos Aires

La orquesta salsera La Novel, llegó especialmente desde Lima Perú a Buenos Aires para presentarse, en único concierto el pasado viernes 23 de mayo en el local del Kory Megadisco. El evento formó parte de un concierto salsero 2008 organizado por la Productora de Espectáculos Tres Cruces Producciones del amigo Victor Cruz Campos, Vitucho. Los músicos ofrecieron una conferencia de prensa un día antes a los medios de la colectividad en el restaurante Inca, sí Señor (Bartolomé Mitre 2022)

Jornadas de lenguas originarias

El Centro Universitario de Idiomas organizó jornadas de Lenguas Originarias con el título de "La otra semana de Mayo". Las mismas se llevaron a cabo desde el día Lunes 19 de Mayo hasta el Jueves 22 de Mayo, de 18 hs a 21 hs en el hall y Aula 110 de la Sede Centro del CUI (Junín 222, Ciudad de Buenos Aires). El tema central de las jornadas será: ¿Por qué enseñar Lenguas Originarias hoy?. El jueves 22 de Mayo hubo una charla debate donde disertaron Representantes y Funcionarios del Cuerpo Diplomático de los Estados de: Bolivia, Paraguay, Ecuador, Perú y Colombia, Autoridades del Centro Universitario de Idiomas -Directores, Coordinadora del Programa de Lenguas Originarias y Profesores. Por Perú participó la Agregada de Prensa y Cultura Ana Teresa Lecaros Terry.

El cumple de Zenobia

El pasado 25 de mayo estuvo de onomástico la señora Zenobia, de la peluquería del mismo nombre que labora en la galería Outlet Abasto (Av. Corrientes 3276, Abasto). El cumpleaños lo celebró en compañía de sus hijos, nietos, familiares en un conocido restaurante de Puerto Madero. Zenobia lleva 15 años en la Argentina y es natural de Mala, pero desde los 5 años se fue a vivir al puerto de Chimbote.Felicidades!!

MIL participó en actos por 25 de Mayo

El Movimiento de Integración Latinoamericano (MIL) el pasado 25 de Mayo, día de la Revolución de Mayo en Argentina (1810), acompañó en los festejos de conmemoración de esta fecha en el Club Social y Cultural denominado El Corralón, en Av. Gaona 4660 (Flores), allí hubo presentación de obras de teatro como también de artistas con música folklórica y también peruana. La gente del MIL elaboró una deliciosa pollada al estilo peruano que degustó el público argentino. El MIL es presidido por Salvador Gutierrez, quien recientemente su libro Un día más un día menos, acaba de ser reconocido de interés legislativo por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires.

La voz de los sin voz


LA OTRA ESQUINA
Por Carlos Gallardo Guarniz
Un hecho que ha pasado inadvertido para la gran mayoría de peruanos que residimos en la Argentina –se estima que ya bordeamos los 300 mil- ha sido la presentación del documental Lágrimas de Wayronco, que se ha exhibido en el marco del Festival Internacional del Cine de Derechos Humanos (DerHumALC) del 8 al 14 de mayo en Buenos Aires. El largometraje, que dura 96 minutos, trata sobre el conflicto armado que sufrió el Perú durante las décadas del 80 y 90, y que, según el informe de la Comisión de Verdad y Reconciliación (CVR) la sangrienta y sanguinaria guerra entre las huestes maoístas de Sendero Luminoso, el Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA), las Fuerzas Armadas y policiales y paramilitares que conformaron el terrorismo de Estado que se implantó por esos oscuros años en gobiernos "democráticos" dejó como calamitoso saldo la escalofriante suma de más de 70 mil muertos y desaparecidos.
El productor de este documental es Jorge Meyer, un español que decide abandonar su vida familiar sin sobresaltos económicos y su cómoda profesión de realizador publicitario en el Viejo Continente para embarcarse a ultramar e ir al encuentro de los andes peruanos. Al no recibir financiamiento para esta película en Europa, Meyer decide hipotecar su casa y lanzarse a la aventura quijotesca de llevar a cabo su opera prima Lágrimas de Wayronco, que pone, por primera vez y a escala mundial, el holocausto que vivieron los pueblos de la serranía y selva peruana durante más de 20 años.
El documental impresiona y pone los pelos de punta de principio a fin al espectador por todo lo que allí se trata: primeramente la crudeza de los testimonios que describen, con lujo de detalles, muchas veces quebrándose en el dolor, las atrocidades que cometían los terroristas y las propias fuerzas del orden, como por ejemplo el testimonio de una humilde campesina ayacuchana que llora desconsoladamente al narrar que fue salvajemente violada por cinco, seis, siete y más integrantes del ejército peruano, y que producto de esa violación nació un hijo, producto de esa violación su esposo decide abandonarla a su suerte. O como aquella otra no menos espeluznante que cuentan las madres campesinas que, en manos de los senderistas, se veían obligadas a matar a sus hijos pequeños para que no lloren o hagan ruido y ser delatados ante el ejército. Hay otros testimonios impresionantes donde la gente era obligada a cavar su propia fosa y ser enterrados, vivos en muchos casos. También hay testimonios de ashánincas que cuentan que los senderistas llegaron y se llevaron a sus padres, los cuales nunca más volvieron a ver. Los testimonios son, uno más que otro, aterradores, inenarrables que producen náuseas al espectador por el salvajismo de los acontecimientos.
El documental se vale en muchos casos de la ayuda de las imágenes y entrevistas del artista ayacuchano Edilberto Jiménez quien plasma las historias de terror por esos años en conmovedores dibujos y retablos de lo que fue ese genocidio compartido entre senderistas, emerretistas y las propias fuerzas armadas peruanas.
El largometraje trata de ser lo más equilibrado posible recogiendo testimonio y entrevistas de los propios protagonistas de la masacre, como a senderistas y emerretistas condenados a cadena perpetua y que en algunos casos se muestran arrepentidos, algunos simplemente dicen que se equivocaron pero que lo volverían a hacer porque las circunstancias y la historia así lo ameritaban. Hay otros testimonios, de los militantes de Proseguir, de Sendero, delirantes, que quieren seguir la lucha armada hasta llegar hacer de la tierra un paraíso, los mismos consideran a Abimael Guzmán un traidor por haber firmado el acuerdo de paz con el gobierno de Fujimori.
El documental también toca de cerca al actual presidente Alan García, pues cuando él estaba en plena reunión de la Internacional Socialista en la lejana Europa, en Perú las fuerzas policiales mataban a mansalva a todos los presos acusados de terrorismo en el penal Castro Castro. García en ese entonces prometió que se iba a investigar hasta las últimas consecuencias y llegar hasta los puestos de mayor jerarquía, sin embargo, el Almirante Giampietri, quien dio la orden para que se ejecutara esa masacre, hoy, no se sabe si como castigo o premio por su accionar, ocupa el cargo de Vicepresidente de la Nación.
También Fujimori es protagonista principal en el film, el ex presidente, quien actualmente está siendo juzgado en el Perú por delitos de lesa humanidad y que se ríe de la justicia peruana, pues en pleno juicio se queda dormido, le da ataques de risa, sufre de amnesia y, por último, diseña su estrategia de campaña para el 2011 en pleno juicio oral. Se ve a un Fujimori, henchido de orgullo, declarando a la prensa que las penas a los terroristas ahora sí se aplican con la severidad del caso –dice- con una aureola siniestra de satisfacción en su rostro, que los presos sólo tienen media hora para salir de sus celdas y ver la luz solar. Su compinche Vladimiro Montesinos también es notificado sobornando a los congresistas de la República para que se pasen a las filas del fujimorismo. Sus vínculos con el narcotráfico son puestos en evidencia y los cupos que cobraba para que operen libremente los narcotraficantes en la selva peruana saltan a la vista, como aquel barco de la Marina de Guerra del Perú que parte a Estados Unidos cargado de cocaína camuflada en latas de atún; la denuncia la hace el laureado economista Oscar Ugarteche, quien también dice que el FMI y el Banco Mundial financió la campaña electoral de Fujimori.
El documental abunda en otros testimonios de actores de la política peruana como a un Rafeal Rey, actual Minstro de la Producción, que en ocasión del terremoto en Perú ocurrido en agosto pasado, no tuvo mejor idea que crear el Pisco 7.2 que era el grado de intensidad del movimiento telúrico en la escala de Richter que mató a centenares de personas en el sur del país. El insensato de Rey trató de justificar lo injustificable, diciendo que todos los asesinatos son repudiables, pero que en su balanza de valores morales los asesinatos de los senderistas son mucho más graves que los cometidos por las fuerzas armadas. Hay otros testimonios, más centrados, como los de Javier Diez Canseco, Salomón Lerner, ex presidente de la CVR.
Después de ver el documental uno sale como alma en pena, con un sabor amargo de saber que el Estado y la sociedad peruana siempre han vivido dándole la espalda a nuestras poblaciones de la sierra y selva. El abandono que ha habido por parte del Estado, la pobreza en que han quedado sumergidas esas poblaciones ha sido el principal caldo de cultivo para germinar posturas tan extremistas como las de Sendero Luminoso y el MRTA ocasionando el conflicto armado fratricida que mataba salvajemente a indefensos y humildes campesinos, que, en medio del conflicto, no les quedaba más remedio que sumarse a las fuerzas del orden o afiliarse a las huestes subversivas, ya que, si se mantenían al margen era como estar indefensos en medio de la jungla salvaje a expensas de los leones por un lado o las hienas por el otro.