jueves, 13 de diciembre de 2012

Consulado en Buenos Aires le cierra las puertas al Consejo de Consulta

Integrantes del Consejo de Consulta ofrecen conferencia de prensa dando a conocer su malestar por las recientes medidas de Cancillería de negarles el espacio del Consulado para reunirse
El Consejo de Consulta de la comunidad peruana en Buenos Aires denunció que el Consulado Peruano en esta jurisdicción le ha cerrado las puertas para que puedan reunirse a trabajar en la problemática de los peruanos en esta ciudad. Así lo dieron a conocer en una conferencia de prensa ofrecida el día lunes 3 en las instalaciones del restaurante La Casona de Don Francisco, en el Abasto.
Visiblemente incómodos por esta situación, los integrantes del electo Consejo Consultivo 2012 convocaron a la conferencia de prensa para dar a conocer esta negativa del Consulado a la cual tildaron de ser un atropello y abuso por parte de Cancillería. Según los consejeros, este rechazo a reunirse en las instalaciones de nuestra sede diplomática de Av. Rivadavia 1501, se debe a órdenes expresas del canciller Roncagliolo, que ha instruido especialmente a los consulados de Buenos Aires y México, Distrito Federal, a que en sus instalaciones no se reúnan los consejeros toda vez que entre sus integrantes se sospecha existen elementos que son miembros del Movadef, brazo político de Sendero Luminoso; y esta negativa, este portazo que le propina el Consulado negándole la posibilidad de reunirse en sus instalaciones, según los consejeros, es extensiva para todas las organizaciones y asociaciones de la colectividad, es decir, en otras palabras, el Consulado le ha cerrado las puertas a los peruanos en Buenos Aires. Una decisión arbitraria, polémica y a todas luces cuestionable que atenta contra los propios principios de los Consulados, de ser entes que promuevan el intercambio, la participación y difusión de la cultura peruana en el exterior, pero si se nos cierra las puertas del Consulado cómo se va a promover estas buenas intenciones, que, en la práctica, resultan letra muerta.
Como se sabe, la prensa en Perú ha especulado que la consejera en Buenos Aires Gina Huarcaya sería integrante del Movadef, y a pesar de que ella lo ha negado por enésima vez a los medios de prensa Cancillería prefiere tomar recaudos al respecto tomando una decisión radical que por demás perjudica a la comunidad peruana. Esta misma situación habría sido la causa por la cual el presidente Humala, de reciente visita oficial en Argentina, no habría querido reunirse con la comunidad peruana en Buenos Aires, ciudad que alberga al mayor número de inmigrantes peruanos.
A través de una carta al pedido de los consejeros de reunirse con el mandatario peruano, Cancillería se excusó respondiendo que debido a su ajetreada agenda era imposible llevar a cabo esta reunión; sin embargo, al caer la tarde al presidente Humala se lo ha visto en fotos corriendo muy a sus anchas en una plaza de Retiro, mientras el Movadef conferenciaba en la Universidad de Buenos Aires pregonando el pensamiento Gonzalo como la verdad universal.
De otro lado, a través de un comunicado emitido al Consulado y a la comunidad, el Consejo de Consulta lamenta que Cancillería haya tomado la decisión de presionar para que el embajador Lynch renuncié a su cargo de diplomático en Argentina, al mismo tiempo, en dicha misiva, valoran el trabajo de su gestión como embajador y aprecian su compromiso al abrir las puertas de la Embajada a los peruanos sin distinción de credo y escuchó nuestros reclamos, como así también resaltaron sus buenos oficios y diligencias para gestionar los acuerdos entre los bancos Nación de Argentina y de Perú para las remesas de dinero de los compatriotas hacia nuestro país. Finalmente, terminan la carta deseándole el mejor de los éxitos a futuro en sus diferentes actividades y funciones a desempeñar.
En otro momento de la reunión con los medios de prensa, dieron a conocer su plan de trabajo a ejecutar, entre los cuales solicitan a Cancillería que se implemente un 0800 para mejorar los reclamos y atención en el Consulado; asimismo, la creación de consulados en la zona norte y sur del Gran Buenos Aires. También indicaron que otro de los pedidos que han hecho al ministro Amézaga es que los empleados que atienden en nuestra sede diplomática de Av. Rivadavia 1501 tengan un carnet de identificación para que los usuarios sepan qué empleado le está atendiendo. El tema de la revalida y homologación de títulos profesionales y los tratados del Mercosur para que se cumplan en menor tiempo, entre otros aspectos formaron parte de su alocución.
Los integrantes del Consejo de Consulta entregaron una carpeta a los periodistas presentes detallan-do documentación de lo expuesto en la conferencia de prensa.

martes, 11 de diciembre de 2012

Los funerales del "Tío Pocotón"



LA OTRA ESQUINA
Por Carlos Gallardo Guarniz

La muerte del músico Ángel Flores, que como tal, es decir, bajo ese nombre era un virtual desconocido pues se sabe entró en la historia de la vida musical como “El Tío Pocotón”, como cariñosamente era conocido en el mundo artístico. Los funerales de su deceso ha conmovido a la comunidad peruana en Buenos Aires. La familia Flores, se dice por petición del propio difunto, ha querido honrarlo bajo dos días de jolgorio y 3 noches de jarana como él mismo lo pidió en la agonía de su vida. 
Desde hace meses el músico padecía de un cáncer terminal que venía haciendo estragos su malogrado estómago; en las últimas semanas la enfermedad avanzó agresivamente y el artista mostraba una imagen muy venida a menos. Desmejorado físicamente, y ya sabiendo que la muerte le era inminente, que su destino estaba escrito; luego de arreglar los asuntos de su alma con Dios, por intermedio de su hija Vanesa, quien es evangelista y que llegó desde Perú para estar con su padre en los últimos días de su vida y para entregarlo a Cristo, el patriarca de los Flores reunió a su familia para pedir su última voluntad. Con su voz ya moribunda fue él mismo quien pidió que, antes de llevarlo a su última morada, lo velen dos días en su casa de Carlos Berg al 3500, en el barrio de Pompeya. Y así fue; sus hijos, con profunda tristeza en sus corazones, cumplieron la voluntad de su padre.
El domingo 2 de diciembre, al mediodía, cuando transitaba los 59 años de edad, Héctor Barandiarán, en el programa Con cajón y guitarra de Radio Master, anunció el deceso del músico y se corrió la voz en la colectividad que se había apagado la voz de Ángel Flores; el hombre nacido en el barrio de Caquetá, en San Martín de Porres, Lima, el de las manos virtuosas para la guitarra y el bajo y que supo inculcar en sus hijos el arte de la música que corre por sus venas, había muerto luego de sufrir una penosa enfermedad; pero la muerte es sólo un accidente en la vida de este hombre, pues pasará a la historia como El Tío Pocotón, el de la risa hilarante y de la chispa a flor de piel, el artista que consagró su vida a la música, prueba de ello está su extensa trayectoria y cuyas sinfonías musicales abarcó desde el anchuroso género de la cumbia, pasando por la salsa y ritmos criollos, hasta entrarle a los temas románticos y los boleros de época. Así da cuenta su frondoso currículo que va desde el legendario grupo Los Maracaibos de Pedro Miguel, leyenda entre las leyendas; también formó parte del elenco de Los Beta Cinco, la cumbia de nuestros viejos, la de las penas sin consuelo. Los acordes de su guitarra se dejaron sentir plácidamente acompañando a Los Girasoles. En Argentina derrochó su arte junto al “Negro Memín” en el Grupo Karicia, cuando este elenco tocó el cielo con las manos y se mantuvo en la cresta de la ola de la popularidad. Pasó por Ciclón; junto a su familia decide formar su propia banda musical: kopacabanda; donde los pocotines y trompitos hacían gala de su talento con la música tropical; más tarde refuerza las filas de Son Latino, orquesta salsera que formó su hijo Cristian.
Pocotón, en su dilatada trayectoria, ha sido invitado innumerables veces para tocar en los eventos que organizaban el Consulado y Embajada del Perú en Argentina; asimismo, acompañó al grupo de música afroperuana que triunfa en la Argentina, Los Negros de Miércoles. Y en Perú tocó para los músicos de la talla de Carmencita Lara y el bolerista Iván Cruz.
Como músico de raza era lógico que quería morir en su ley, bajo los acordes musicales que acompañen su féretro, y los artistas de la comunidad así lo sintieron y por eso fueron hasta su casa para despedirlo de una manera muy particular, distinta a la que cualquier mortal está acostumbrado a despedir a sus seres queridos. Así, los instrumentos musicales y las voces se confundieron en el aire entre el canto y el sollozo, entre la alegría y la pena, entre el festejo y el velatorio. En primer término llegó el tributo de la orquesta salsera más renombrada en Perú, La Camaguey, quien por esos días había llegado a Buenos Aires para ofrecer su show gracias a “Papuchi Internacional”, productora que lleva el sello de la familia Flores. Los músicos le hicieron un homenaje el domingo 2 en el local del Fantástico Bailable de Once, también Los Negros de Miércoles ofrecieron otro concierto en su memoria.
Los dos días siguientes, y bajo una extenuante vigilia y cansancio propio de la malanoche, una muchedumbre de compatriotas fue a despedir al “Tío Pocotón” y a ofrecer las condolencias a la familia Flores. La señora Silvia, la viuda, una mujer de temple y muy emprendedora, lucía muy afligida, triste y guardaba un luto cerrado casi sin omitir palabras. El público, para llegar hasta su ataúd y rezarle un padrenuestro a su alma, tenía que sortear un jardín de ramos florales y coronas esparcidos por todo el ambiente; la gente que llegó fue acomedida con los deudos a la hora de remangarse la camisa y poner manos a la obra ayudando en la elaboración de la comida y ofrecer bebida a los presentes; mientras tanto, toda la legión de artistas peruanos –liderados por los hijos de Pocotón, y entre ellos Cuchi, en el fragor del entierro, parecía ser el director de orquesta, el que movía los hilos de la organización en este funeral- se turnaron para ofrecerle una maratónica jornada musical de despedida en reconocimiento a su trayectoria. Entre los innumerables músicos que pude distinguir en el improvisado escenario que se armó en la puerta de su casa, convertido en velatorio, observé ofrecer su talento a Silvana Moreno, Coco Torres, Chato Cahua, Joaquín Campos, Dany, Luigui, Héctor Barandiarán, José Acasiete, Dante Mejía, Carmen Leiva, Silvia y Sentimiento Juvenil, entre muchos otros que lo recordaron al son de ritmos cumbiamberos, sonoras serenatas, salsas duras y sensuales, y nuestro vasto repertorio criollo se hizo presente para homenajear a un artista que abarcó todos estos géneros musicales con un talento muy particular.
El martes 4 de diciembre, bajo un sol abrasador, antes de partir hasta el cementerio de La Chacarita, el féretro fue sacado en hombros por sus hijos. A todos los presentes se nos hizo un nudo en la garganta y la emoción dio paso a las lágrimas en los ojos; los músicos se esforzaban al máximo para no dejarse vencer por el momento; El Tío Pocotón partía alegre a la eternidad, bailando al son de sus hijos que meneaban su ataúd mientras una solemne sinfonía se dejaba escuchar ahogando el grito de angustia y de dolor y pena que se apoderó de los presentes. El cortejo fúnebre, que incluyó dos micros llenos de gente y una caravana de autos, partió pasadas las 3.30 p.m.
La muerte del Tío Pocotón ha sido la más generosa ocasión funeraria que registre los anales históricos de la comunidad peruana en Buenos Aires, tanto así que de no haber estado presente hubiera creído que los acontecimientos narrados han sido producto de la imaginación como en una novela mágica de García Márquez. Hasta siempre querido “Tío Pocotón”

El embajador Lynch y el Movadef


LA OTRA ESQUINA
Por Carlos Gallardo Guarniz
Nicolás Lynch, el hasta hace unos días embajador del Perú en Argentina, ha sido destituido de su cargo de manera injusta, y, en todo caso, su renuncia constituye un rarísimo caso de decencia en la política peruana. Es un secreto a voces que Cancillería lo obligó a renunciar porque en febrero de este año recibió a integrantes del Movadef; esto, ni siquiera es cierto, pues el video que difunde la prensa en Perú –tomado de la página web www.ecoslatinosperu.com.ar del colega Jaime Velásquez- está fuera de contexto. Yo estuve presente en aquella jornada de protesta, y el grupo que convocó a la marcha fue un tal “Comité Impulsor de la Coordinadora Latinoamericana”, y lo hacían en defensa de los recursos naturales y medioambiente, es decir, protestaban porque no estaban de acuerdo con el proyecto minero Conga. Si se viera el video completo podrán apreciar que no se distingue a ninguna bandera que simpatice con el Movadef; en cambio, los manifestantes portaban una enorme bandera peruana, banderas del MTL (Movimiento Territorial de Liberación), y los que acudieron a la protesta, en su mayoría, eran los que habían hecho campaña a favor de Ollanta Humala a través del partido Gana Perú con base en Buenos Aires, Argentina.
En total han sido 3 marchas a nuestra Embajada de Avenida Del Libertador al 1720, la segunda la convocó la agrupación política Tierra y Libertad conjuntamente con el CIEPA, que es una agrupación estudiantil  de universitarios peruanos en Buenos Aires. Hay una tercera convocatoria, la que menos gente llevó, y la que fue convocada por el Movadef y Cambia Perú para el día 8 de junio, y cuyo petitorio fue recibido por una empleada de la Embajada. El Sol del Perú, luego de publicar aquella jornada de protesta en nuestro muro de Facebook, en donde se ven fotos de ambas agrupaciones, recibió un mail de Cambia Perú, sede Lima, en la cual hacían un deslinde y desautorizaban a Reynaldo Rubio, quien era uno de los convocantes, diciendo que él ya no pertenecía a dicha agrupación política, por lo tanto precisaban que no tenían nada que ver con aquella jornada de protesta donde sí participó el Movadef. De estas tres protestas, la única que nuestra autoridad diplomática recibió a los manifestantes fue en la primera. El embajador Lynch salió a recibir a los protestantes, quienes estaban en la puerta de la Embajada arengando ¡oro sí, agua no! Y Lynch tuvo un gesto que habla por sí solo de un demócrata a carta cabal, y les dijo que su accionar habla de la salud democrática que vive el Perú y que demuestra que en Argentina hay distintos puntos de vista sobre las decisiones políticas del actual gobierno. Acto seguido invitó a pasar a la “Casa de los Peruanos” para recibir su petitorio.
Sin embargo, el embajador Lynch, en declaraciones a la prensa manifiesta que sí recibió a la agrupación Movadefa, brazo político de Sendero Luminoso en Argentina, motivo por el cual ha sido destituido de su cargo, cargo que, a pesar del poco tiempo que llevaba, apenas un año y meses, había desplegado una importante actividad política a favor del gobierno peruano en su trabajo de estrechar los vínculos con Argentina, y para eso abrió las puertas de la embajada a la prensa argentina dando a conocer la política del presidente Ollanta, así lo testimonian los diferentes reportajes a los medios locales que concedió. En el campo cultural desplegó una importante actividad con Conversatorios y charlas para dar a conocer el pensamiento de actores relevantes en la política y literatura peruana y latinoamericana, como es el caso de González Prada, Mariátegui, Arguedas, Haya de la Torre y José Ingenieros, esta última realizada en la Casa Patria Grande presidente Néstor Kirchner. A lo largo de estas jornadas a asistido público que desbordó las instalaciones de los distintos lugares en donde se dieron cita estos encuentros, y donde además, se contó con la presencia de destacados intelectuales peruanos y argentinos.
El embajador Lynch nunca fue de mi simpatía, pero no tengo duda de que el pedido de su renuncia se ha producido por la presión política y mediática que tienen el aprismo y fujimorismo en nuestra escena nacional, quienes deben estar celebrando la destitución de un hombre con convicciones políticas y que no se vende por un plato de lentejas. Lynch, con su renuncia, demuestra que tiene eso que se llama decencia, honestidad con sus principios, algo que desconocen gran parte de nuestra fauna política que ahora se rasgan las vestiduras escandalizados por este hecho y seguramente se le acusará y vilipendiará –por ser un hombre de izquierda- con epítetos de ser simpatizante de Sendero Luminoso o de hacer apología a favor del Movadef. Porque ahora resulta que los políticos peruanos, y la sociedad arrastrada por una información sesgada y parcializada, han encontrado la excusa perfecta para echarle la culpa a alguien y pedir su cabeza como si con ello se resolvieran las cosas. El Movadef resulta ser la nueva cortina de humo para tapar la miseria moral de país que somos, de ese cáncer corrupto que se extiende como una metástasis incurable en todos los estratos de nuestra sociedad; es más fácil echarle la culpa al Movadef y no hacer un análisis y estudio de conciencia profundo de por qué han surgido en nuestro territorio grupos violentos, extremistas y terroristas como Sendero Luminoso y su mesiánico líder Abimael Guzmán. Y por qué muchos peruanos añoran que regrese ese régimen que albergó a la mayor lacra de políticos que haya conocido nuestra historia, como es el fujimori-montesinismo.
Sendero Luminoso y cualquier otro movimiento subversivo y extremista estará acechando a la vuelta de la esquina mientras en nuestro país la gente se siga muriendo de hambre, mientras exista gente sin trabajo, y los que tienen, sean explotados como esclavos por leyes laborales que no los amparan ni defienden sus derechos; mientras nuestro sistema de salud sea considerado  “matasanos”, donde la gente madruga haciendo colas para mendigar ser atendida por algún médico que vea sus dolencias; mientras el Estado pase la vista de largo por nuestras poblaciones serranas, no escuchando sus reclamos; mientras haya un Estado ausente en su rol de velar por las sectores menos favorecidos, mientras siga habiendo enormes iniquidades sociales, donde un abismo separa a unos pocos que tienen sobre la inmensa mayoría que sobrevive como puede. ¿Qué es esto sino violencia? Mientras estas injusticias sigan ocurriendo en este Perú jactancioso de su crecimiento económico, pero sin desarrollo de país, el Movadef encontrará el caldo de cultivo para adoctrinar gente, y gente joven, que crece sin esperanza, asqueada de este modelo político de injusticia social.
Y en último caso, los del Movadef, el brazo político de Sendero Luminoso, vienen en paz –sino ¿qué es su reunión con las Madres de Plaza de Mayo y el Premio Nobel de la Paz Pérez Esquivel?-, prefiero que vengan así, pidiendo a gritos diálogo antes de que vengan con bombas, porque a fin de cuentas ellos también tienen sus muertos y han sido víctimas de la propia violencia, pues tanto de un bando como del otro, esto es del Ejército y Sendero, así como de los miles de inocentes muertos en esa guerra, ha sido la sangre del pueblo la que ahí se derramó. Y si a mí me preguntasen de qué lado estoy. Mi respuesta sería del lado de la paz y la reconciliación. Escuchémoslos y debatamos desde las ideas antes de mostrarnos intolerantes, absolutistas y antidemocráticos. ¿Por qué sí permitimos el debate del indulto a Fujimori?, y uno podrá estar de acuerdo o no, pero se debate, y hasta los propios familiares del ex presidente Fujimori se dirigieron a Palacio para solicitarle personalmente el indulto al presidente Humala. ¿No habrá llegado la hora de debatir, desde el terreno de las ideas, la amnistía de Abimael?

Niños trujillanos derrocharon talento en Buenos Aires


Se presentaron en el auditorio Beethoven en el marco del VI Festival Mundial de Buenos Aires Coral

En el marco del VI Festival Mundial de Buenos Aires Coral, que recorre diferentes escenarios de la Ciudad y de la provincia de Buenos Aires, el pasado 6 de noviembre se presentó el "Coro de los Niños Cantores de Trujillo en el auditorio de la fundación Beethoven. Esta presentación correspondió a un concierto gratuito que coordinó la Embajada del Perú en Argentina con la asociación artística Punto Arte y la propia fundación Beethoven. Lamentamos que haya asistido tan poco público peruano a este extraordinario espectáculo musical donde el elenco infantil trujillano derrochó talento artístico en el escenario con lo mejor de su repertorio. Bajo la batuta de su director Manuel Loyaga Bartra, el Coro de Niños -que se presentó con impecable traje blanco de marinera y llevaban una estampilla con la imagen de la Virgen de la Puerta colgada al cuello- nos deleitó con una combinación de música que fue desde la barroca hasta la contemporánea, pasando por huainos, valses y cumbias; despidiéndose con marineras que, como manda la tradición, no fue una sino dos, pues no hay primera sin segunda; así el poco público presente disfrutó de temas como Ave María, Empezó la ronda, Merengue dominicano, El cascabel, La pampa y la puna, Así es mi Perú, Chabuca limeña, Ojos azules, Así baila mi trujillana, entre otros temas.
Manuel Loyaga Bartra comentó que en setiembre del 2011 participaron del IX Festival Internacional de Coros Ecuador "Cantemos Unidos" teniendo una destacada participación y siendo ovacionado en la noche de gala de dicho festival, lo cual le ha servido para lograr su internacionalización y ser invitado a participar de este sexto Festival Mundial Buenos Aires Coral.
También se distinguió con diplomas a Oscar Gonzáles, agregado de Cultura de la Embajada del Perú en Argentina por hacer posible este concierto como así también a autoridades de la fundación Beethoven, donde en sus instalaciones se exhibieron muestras fotográficas y artesanía peruana.
Felicitamos a la Embajada por promocionar este tipo de espectáculos gratuitos para la comunidad y sociedad argentina, pero, al mismo tiempo, criticamos que este evento sea únicamente por invitaciones, cuando un recinto como el auditorio Beethoven, con capacidad para unas 500 personas, fácilmente hubiera estado atiborrado de compatriotas disfrutando este espectáculo si la convocatoria hubiera sido abierta.
Asimismo, destacamos el trabajo de Manuel Loyaga Bartra, joven músico trujillano autodidacta, pues gracias a su tozudo espíritu emprendedor puede hacer realidad este Coro de Cantores de Trujillo, a fuerza de ganas y a pura voluntad sin ayuda económica de las autoridades trujillanas (más dedicadas a promover otro tipo de actividades y espectáculos donde pueden sacar rédito político de las multitudes que convocan), llevan adelante conjuntamente con los padres de los niños, este Coro de Niños que participa exitosamente en los diferentes lugares –nacionales e internacionales- donde es invitado a participar. Un ejemplo digno de imitar.

La fe en el Señor de los Milagros



LA OTRA ESQUINA
Por Carlos Gallardo Guarniz
El Señor de los Milagros, como todos los meses de octubre, desde hace ya 24 años, y de manera ininterrumpida, se ha reencontrado con sus fieles en Buenos Aires. El fervor peruano se ha vivido desde tempranas horas alrededor de las inmediaciones de la iglesia La Piedad, en las esquinas de Mitre y Paraná, a donde iban llegando los devotos para presenciar la solemne misa que ofreció el padre Tulio Andrés Camelli, que en su homilía resaltó la labor de los hermanos peruanos, mencionando especialmente a los integrantes de la Sexta Cuadrilla, conformada en su mayoría por jóvenes y que este año han tenido el honor de guardar la venerada imagen, para lo cual se han venido preparando en lo que va del año.
Párrafo aparte merece la metida de pata del mismo asesor espiritual de la Hermandad, que en plena misa, y frente a las más altas autoridades diplomáticas peruanas, así como ante una imponente multitud de fieles que colmó el templo llamó “perucas” a los fieles peruanos. Esta desafortunada expresión la dijo refiriéndose al cardenal Bergoglio cuando acotó: “Todos los que se encuentran en esta misa sus pecados le van a ser excomulgados –esto es perdonados- siempre y cuando realicen una confesión dentro de los 8 días; esto me lo ha dicho el propio Arzobispo: ‘dígale esto a los perucas’  -mencionó- como diciendo que Bergoglio había dicho esta frase, pero cuando se dio cuenta de su exabrupto quiso corregirse diciendo: no, perdón, dijo: ‘Dígale esto a los hermanos peruanos’. Quedará por saberse si quien dijo esta frase discriminadora y peyorativa con que algunos argentinos utilizan para referirse despectivamente a los peruanos fue hecha por el cardenal Bergoglio, quien se lo comentó al padre Camelli en confianza y en la intimidad clerical o si fue el Asesor Espiritual quien lo pensó y lo dijo en voz alta en plena misa. Me temo que esta respuesta el padre Camelli lo guardará como un secreto bajo siete llaves y la verdad se lo llevará consigo hasta la tumba.
En las afueras de la Basílica el público vivía una fiesta, ya la banda de músicos hacía notar su presencia entonando sonoras marineras y alegres valsecitos criollos que hacían mover los pies y menear las caderas al público; una devota, no pudiendo contener su alegría, sacó su pañuelo y se echó a bailar una salerosa marinera, las bolsas del supermercado que llevaba en mano no fue obstáculo para expresar su algarabía porque en breve vería el rostro del Señor. La puerta de la iglesia estaba adornada con globos de color blanco y morado, con banderas argentinas y peruanas y motivos religiosos que le daban un clima festivo; por su parte, las hermanas sahumadoras y cantoras se encargaron de realizar la ya tradicional alfombra floral, una verdadera obra de arte que elaboran desde muy temprano. Con las primeras luces del día estas mujeres se levantan presurosas, y acaso si apenas pueden conciliar el sueño en la noche, pensando cómo decorar la alfombra que da la bienvenida al recorrido procesional y que este año ha llevado impreso, en coloridos tonos, la leyenda: Año 2012. El año de la Fe.
Y aquí debo acotar que por más que se esfuerce la Iglesia –y la misma Hermandad- en que los fieles asistan con la misma puntualidad que lo hacen en octubre el resto de los meses del año, no lo van a poder lograr, pues octubre para los devotos del Señor de los Milagros es como diciembre para la grey católica, tiene ese sabor especial, tiene ese espíritu festivo-religioso que lo hace distinto. Y pienso que está bien que esto ocurra así, pues no tendría la misma satisfacción si todos los meses fueran octubre y diciembre. Eso, lo de la rigurosidad para asistir a las ceremonias religiosas, dejémoslo para quienes han encomendado de lleno su vida a Dios. Y digo ceremonias religiosas, pues ya se sabe que uno, el creyente de a pie, camina todos los días con su fe a cuestas, como lo ha hecho el hermano Lobatón en esta procesión. Sabido es que estuvo a punto de perder sus piernas, un severo cuadro de diabetes lo mandó a estar internado en el hospital por varias semanas. Su pronóstico era reservado y era inminente una amputación a sus extremidades para salvar su vida; sin embargo, y a pesar de haber perdido uno de sus pies, Lobatón acompañó vigorosamente todo el peregrinaje ayudado por un par de muletas. ¡He ahí a un hombre lleno de fe! Y me pregunto cuánto habrá tenido que ver la robustez de su creencia en el Cristo de Pachacamilla para tenerlo de vuelta en esta procesión que acaba de concluir.
Hay que tener fe, porque una persona sin fe es como alma en pena que deambula sin rumbo por la vida, pues hasta los ateos que se dicen no creyentes tienen fe. Y bien lo expresa el bolero de la copa rota: “Aturdido y abrumado por la duda de los celos se ve triste en la cantina a un bohemio ya sin fe”. Y este bohemio ya sin fe está sin alma, es un hombre desahuciado. Y el hombre, por ser tan soberbio y racionalista, derivó su pensamiento en el pesimismo, y si no lean a Nietzsche y todos sus acólitos.
El Señor de los Milagros es el Cristo Peruano, y no sólo porque es la fe de los peruanos en Dios, representado aquí en la imagen de un Cristo Crucificado que dice la leyenda fue pintado en un mural por un esclavo negro en los villorrios de Pachacamilla, y que quedó en pie luego de sucesivos terremotos que azotaron a Lima. Y este Cristo es nuestro patrono, es en quien los peruanos depositamos la custodia de nuestras vidas, de nuestra salud y le pedimos que nos libre de enfermedades y nos proteja de todos los males. Y en octubre, que es su fiesta, el pueblo sale a agradecerle, a rendirle su tributo; los creyentes vienen a rezar y a pedirle, es cierto, pero fundamentalmente vienen a agradecerle por las bendiciones recibidas. Y así es la fe del peruano, no es de puertas adentro morando en un claustro de la abadía, no es de confesiones ante el cura, es, diría yo, como le legaron sus ancestros los incas, de rendirle tributo y agradecimiento como en la ceremonia de la Pachamama; para el devoto del Señor de los Milagros confesarse no le quita su angustia pecaminosa como sí cargar las andas del Señor y sentir en carne propia el peso de su culpa. Vivir ese trance de dolor y gozo a la vez es su mayor felicidad, es su alivio. Y es por eso que el mayor castigo para un hermano es no permitirle cargar las pesadas andas de su Cristo Moreno.
El peruano, a diferencia del católico dogmático que vive en las iglesias rezando, exterioriza su creencia fuera de los templos, mezclando lo sagrado con lo profano. Hay un sincretismo religioso palpable en la procesión del Señor de los Milagros, en este nuestro Cristo de Pachacamilla; por un lado están esos rostros compungidos de dolor y de angustia que son las hermanas sahumadoras y cantoras quienes representan a María, la madre de Dios, que acompañó a Jesús durante su calvario antes de ser crucificado. Así, estas mujeres, 2 mil años después, custodian el recorrido procesional implorando con sus cánticos a Dios, y lo hacen vestidas sobriamente con sus túnicas de color morado y cubren sus cabezas con una corona de  pañuelos blancos dejando entrever en sus rostros un aura de aflicción, de pena y dolor como quien acompaña a un moribundo. Lo mismo que hizo la virgen María con su hijo Jesús. Y ese incienso de mirra que emanan hacia el cielo y que se impregna en nuestras ropas, tal vez sea ese bálsamo medicinal que cura nuestros cuerpos o ese aroma de la fe que purifica nuestras almas pecadoras. Y por otro lado, está lo pagano, están los homenajes y la fiesta al Cristo Crucificado, fiesta que acaso es la alegría porque Jesús resucitó al tercer día de entre los muertos. Y aquí es donde se ve reflejada la herencia religiosa de los pueblos del Tawantinsuyo, el culto a los Apus son los tributos que los hermanos de las cuadrillas, o empresarios o devotos de manera particular, solicitan a la Hermandad para realizar sus homenajes, que en realidad es un agradecimiento al Todopoderoso. Y entonces lo místico, lo espiritual y religioso se confunde con lo fervoroso, con lo festivo y la vitalidad bajo el aliento de la fe. Así viven los peruanos su devoción religiosa en el Señor de los Milagros.

El resurguir del Consejo de Consulta


LA OTRA ESQUINA
Por Carlos Gallardo Guarniz
La reciente convocatoria para la elección del Consejo de Consulta 2012-2013 ha convocado a un número importante de más de 700 personas para elegir, entre 24 candidatos a 9 representantes de la comunidad. Aunque el número es exiguo si tomamos como porcentaje los más de 300 mil peruanos que viven en Buenos Aires, resulta muy significativo si tomamos en cuenta que la participación en las dos últimas convocatorias para el CC apenas si llegaron a un puñado de una veintena de participantes; y este desinterés de la comunidad fue acrecentado por la poca difusión del Consulado, pero por sobre todo, que a partir del 2008 el Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú cambió su reglamento exigiendo un porcentaje mínimo del 3% de inscriptos en la jurisdicción consular, que para el caso de Buenos Aires rondaría los mil ochocientos votantes tomando en cuenta los más de 87 mil peruanos inscriptos en esta ciudad.
Esta medida fue duramente cuestionada por los peruanos en el exterior ya que tenía como propósito desalentar la participación de los connaciones, teniendo como intención la desaparición de este órgano de consulta, que con todas sus falencias y restricciones de ejecución a cuestas, significó una piedra en el zapato para el propio Estado peruano porque los consejeros, si hay algo que los ha caracterizado, es ponerse del lado de la comunidad y no ser obsecuentes ante las autoridades consulares; esta situación los ha llevado a reclamar por mejoras en la atención consular y exigir al Estado mayor atención a los más de 3 millones de peruanos que vivimos en el exterior. Y como ejemplo en Buenos Aires ahí están las marchas a la Embajada reclamando rebajas de costos en los trámites de documentación consular como así también pidiendo la intervención de nuestro embajador de turno ante las autoridades locales por la campaña mediática de estigmatización de la comunidad con los narcos peruanos de la villa de Bajo Flores. Las protestas retumbaron en los oídos de los embajadores Martín Belaunde Moreyra y Judith de la Mata, durante las gestiones presidenciales de Toledo y García. Cancillería tomo nota de esta situación y vio cómo el órgano de consulta que había creado con la intención de quedar bien con los peruanos en el exterior, pero bajo su sumisión y control, se les había ido de las manos; la criatura se les rebeló y se puso del lado de sus hermanos de sangre, huérfanos de autoridades competentes que velen por sus derechos y seguridad estando en el extranjero.
Así las cosas, y ante tantas críticas, Cancillería dio marcha atrás con los porcentajes necesarios y de un extremo se paso a otro, pues se decidió que se elija a los Consejos de Consulta en base a los participantes presentes, es decir, si el pasado sábado 29 hubieran ido 10 ó 5 votantes y se presentaban 3 candidatos, igual había un Consejo de Consulta que supuestamente es representante de la comunidad.
Ahora bien, esta elección del Consejo de Consulta representativo de la comunidad en Buenos Aires es una farsa si tomamos en cuenta la cantidad de peruanos residiendo en la capital argentina; pero por otro lado, ¿a cuántos peruanos les interesa que haya un Consejo de Consulta? ¿Cuántos peruanos saben de su existencia y para qué están? En la Argentina, y me atrevería a decir que a un número importante de peruanos residiendo en el exterior, sólo van a votar para salvarse del pago de multas económicas, les interesa en lo más mínimo, si hasta en las elecciones presidenciales muchos ni saben quiénes son los candidatos, y otros votan a ojos cerrados por tradición política familiar. Con lo cual ya uno puede ir sacando sus conclusiones  que democracia no necesariamente quiere decir que el candidato de las mayorías sea el mejor representante del pueblo; pero sí el que mejor organizado está y cuenta con un séquito de seguidores importante, y esto mismo ocurrió en esta presente elección del Consejo de Consulta, pues los candidatos que obtuvieron la mayor cantidad de votos basaron su triunfo aprovechando la plataforma de que ya gozan con sus agrupaciones políticas como MTL y Pucará, por citar los ejemplos de Ysmael Medina (110) y Francisco Azarte (75).
Asimismo, ha sido elegida como consejera Gina Huarcaya, candidata demonizada por los medios de la comunidad por su supuesta militancia en las filas del Movadef, lo cual ella ha rechazado, pero al menos lo que se desprende de las denuncias es que, mínimamente, alguna simpatía tiene por esta agrupación que busca la amnistía internacional del genocida Abimael Guzmán, quien purga cadena perpetua por delitos de lesa humanidad. Y el tema con el Movadef es que no se puede aceptar a una agrupación política que en ningún momento demuestra arrepentimiento por los delitos cometidos por Sendero Luminoso, todo lo contrario, sus jóvenes militantes reivindican y avivan con loas el pensamiento Gonzalo. Y qué es el pensamiento Gonzalo si no llegar al poder a través del terror y la violencia. El delirio demencial de Abimael nos llevó a una cruenta guerra fratricida entre peruanos que fue sofocada y derrotada por un Estado igual de violento y criminal, corrupto hasta la médula. Más de 60 mil muertos dejó esta sanguinaria guerra y, según el Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, se reparten en igualdad de condiciones los muertos, tanto el terrorismo de Sendero Luminoso como el terrorismo de Estado ejercido por Fujimori y su lugarteniente Montesinos; sin embargo, no leo que algún periodista proteste airadamente y ponga el grito en el cielo si algún candidato muestre simpatía por Fujimori, cuya gestión se caracterizó por ser un gobierno despótico, absolutista y totalitario comprando la línea editorial de los diarios.
Por otro lado, los consejeros electos Orfa Pérez y Johnny Rojas Balladares fueron impugnados como candidatos por estar en el Veraz, es decir, por deber dinero a alguna entidad financiera. Esta situación no prosperó y el Comité Electoral desestimó este pedido. Cabe mencionar que uno de los impugnadores ha sido el periodista Pierre Manrique, que ya sabemos, se han declarado en guerra sin cuartel con el grupo solidario que apoyó la campaña de Vanina y otras actividades más de la misma naturaleza. Por eso no me extrañó que esta denuncia haya sido con el ánimo de mellar y dejar mal parado a ambos consejeros, aunque la objeción para bajar a los candidatos no prosperase; sin embargo, esta impugnación, en cierta forma, echa por tierra otra denuncia que en su momento hiciera el conductor de Algo Más. Recordemos que en su programa radial el arequipeño dejó entrever, maliciosamente, que a través de las campañas solidarias que se realizaban para recabar fondos los organizadores hacían negocios paralelos con las actividades; pues bien, con esta prueba del Veraz se demuestra que no hubo tales negocios paralelos porque dichos candidatos han preferido gastar su peculio económico y su tiempo ayudando a terceros con necesidades urgentes que a fijarse en su propio patrimonio personal. Esto me demuestra el verdadero espíritu solidario de los consejeros; sin querer, Manrique, les ha hecho un favor poniendo en evidencia su honestidad.
Finalmente, el presente escenario de entusiasmo del Consejo de Consulta ha traído a mi memoria la elección del año 2005, donde hubo una masiva concurrencia de compatriotas y donde los candidatos, al mejor estilo de la demagogia política, ofrecieron el oro y el moro cual candidatos a una curul en el Congreso, inflando las expectativas de su trabajo. Esto mismo ha ocurrido con los actuales candidatos, que en su mayoría han hecho propuestas desfachatadas que no les competen; es más, el propio Consejo de Consulta, a pesar de ser autónomo del Consulado, depende de éste para ejecutar alguna actividad. De modo que si no tiene la venia y aprobación del consulado no pueden hacer nada. Entonces, ¿cuál es su función? Recordemos, es un órgano asesor del consulado, que informa al Cónsul acerca de las necesidades y requerimientos de la ciudadanía en diferentes ámbitos, principalmente en actividades solidarias y la promoción de la cultura, en la eficiencia de los servicios consulares, la inserción de los peruanos en el país de residencia; en fin, pero será el Consulado el que debe realizar la gestión, mas no el Consejo de Consulta.
Llegado a este punto, esperemos que el presente Consejo de Consulta no cometa los mismos errores de sus antecesores, que los apetitos personales de los consejeros por figurar no predominen por sobre las buenas intenciones a favor de la comunidad. Asimismo, los medios de información deberíamos dejar de poner palos a la rueda y abandonar nuestro pesimismo con este órgano. No exijamos más de lo que puede hacer un Consejo de Consulta y más bien colaboremos todos en beneficio de la colectividad

El aniversario de La Conga

LA OTRA ESQUINA

Por Carlos Gallardo Guarniz

El pasado miércoles 29 de agosto, el restaurante La Conga (La Rioja 39), celebró su décimo aniversario ofreciendo una gran recepción a sus trabajadores. El agasajo se realizó a partir de las 15 en el local del restaurante El Portal Incaico, donde los trabajadores disfrutaron de una fiesta inolvidable llena de sorpresas, diversión y emociones.
Ocasiones como ésta no se celebran cada día y, por ello, de la mano de sus propietarios; José, Paula y su hija Rosa, el restaurante La Conga decidió festejar su cumpleaños número 10 ofreciendo un almuerzo show a sus trabajadores. El artista Wilber Soto, un viejo amigo de la casa, se calzó el traje de maestro de ceremonia y abrió la jornada conmemorativa haciendo una breve remembranza del sacrificio y empeño que le han puesto sus propietarios, desde sus inicios hasta hoy, para hacer de su actividad diaria un loable esfuerzo por construir una empresa peruana en la Argentina.
Minutos después la emoción embargó a los trabajadores a la hora de realizarse el brindis de aniversario y soplar las velas de una inmensa y colorida torta que daba cuenta de estos 10 años de vida. Y cuando digo trabajadores también me refiero a sus propietarios, y cuando quisieron hablar para decir algo por su décimo aniversario no pudieron decirlo con palabras; ya sus gestos, ya sus rostros llenos de lágrimas y conmocionados por el momento hablaron por sí solos de lo que significa en la vida de ellos haber empezado desde abajo, sin nada, y hoy llegar a ser lo que son, uno de los locales gastronómicos de la colectividad más concurridos donde todos los días, a excepción del miércoles por descanso, cientos de compatriotas –y también argentinos y turistas- acuden hasta sus instalaciones para disfrutar de las exquisiteces de la comida peruana.
Por eso José, doña Paula, Rosa, Franco, Meche, Rocío, Chochito y demás no pudieron contener las lágrimas, porque sólo ellos, que han vivido en carne propia esta experiencia, saben que la travesía desde sus comienzos a la fecha no ha sido nada fácil. Y ese enorme sacrificio que ha valido la pena y ha dado sus frutos en éxito comercial sólo se ha podido conseguir con la unión, con esa amistad y confianza que se logra con un trato cordial y amistoso que se brindan entre los propietarios y los trabajadores como si todos fueran integrantes de una misma familia. Y lo son, no hace falta ser adivino para darse cuenta del buen clima que ahí se respira, de la buena relación que existe entre la administración y los 40 empleados.
Y eso la misma Rosa Valverde lo testimonió con sus propias palabras: “Yo me preocupo por saber si les pasa algo a los chicos, si tienen problemas. Y les hablo porque los quiero, porque para mí son como mi familia, y por eso tenemos gente que trabaja con nosotros desde muchos años, desde que nos iniciamos, porque se han encariñado con nosotros, porque se sienten bien. Aquí todos somos trabajadores” sentenció.
Pero la jornada conmemorativa continuó su curso, y mientras la chef Iris Mendoza nos deleitaba los paladares con la comida, que incluyó, de entrada, tiradito de salmón rosado en crema de rocoto; como plato principal cordero al horno con plátano y batata (camote), y como postre frutilla a la crema; llegó el momento de los premios y reconocimiento a los trabajadores: así por ejemplo, recibieron regalos Meche, Rocío, Chocho, María, Julio, Samuel, Rambo, Sergio; pero antes de llevarse el premio el bolerista Wilber Soto amenazó que no se la llevarían tan fácil, y, de acuerdo a su gusto, elegían entre bailar, contar un chiste o cantar. Y así el resto de compañeros de trabajo gozó viéndolos desenvolverse en esas facetas poco conocidas. Luego, entre los trabajadores se sorteó un premio sorpresa que se lo llevó Verónica, una chica boliviana que trabaja desde hace 6 meses en La Conga y, antes de llevarse el regalo, para no desentonar con el resto de sus compañeros, se despachó de lo lindo bailando un zapateadito huayno.
La velada aniversario continuó con el show musical de Wilber Soto y sus dos invitados especiales salidos de las canteras del restaurante Portal Incaico: Solcito, la Princesita de Portal Incaico (retoño de Iris Mendoza), y de la peña de El Rey del Bolero, Elvis Soto, hijo de Wilber Soto que hicieron bailar de alegría al público presente (trabajadores y sus familiares).
Y todo lo que he vivido en este décimo aniversario confirma lo que ya sabía de antemano de sus propietarios, oriundos de las entrañas de la sierra liberteña (de esa tierra pródiga en escritores universales como César Vallejo y Ciro Alegría): es que el éxito comercial no los ha mareado, ni el humo se les ha subido a la cabeza; todo lo contrario, mantienen el mismo trato cordial y amable que les caracterizó cuando empezaron trabajando en el local del primer piso; y abajo, en planta baja, donde hoy es el salón de comidas de La Conga y antes fungía ser un boliche bailable donde Wilber Soto y otros artistas de la farándula peruana deleitaban al público con lo mejor de su repertorio, y donde José y Paula junto a sus hijas Rosa y Ana hacían las veces de cajeros, de mozos, de cocineros, de lavacopas, en fin. Eran otras épocas, claro, pero siempre se esforzaron por salir adelante, por dar lo mejor a su clientela cuando el éxito no les sonreía, cuando todo se hacía cuesta arriba.
Hoy, el local de comidas, para atender la gran demanda de público cuenta con 5 cocineros que se reparten la cocina, cada uno en su especialidad, para elaborar pescados y mariscos, la amplia variedad en platos criollos, comida china o chaufa, los plato del día (menú) con sus respectivos ayudantes de cocina; asimismo, el sector de pollos a la brasa tiene a un personaje muy querido de la Casa, el ponderado amigo Chochito, quien conoce los secretos mejor guardados para la elaboración de este plato emblemático que los peruanos podemos disfrutar de sus sabores como en nuestra tierra gracias a las manos hacendosas de este amo y señor del horno pollero en La Conga.
En la amena reunión con los periodistas –también estaban Diana Flores y Rosy Paico, esta última colega de Cholo con Che-Rosa nos cuenta que siempre está atenta y presta mucha atención cuando los mozos le devuelven del salón un plato de comidas a la mitad o casi lleno. Se acerca a ellos y les dice ¿qué pasó? Los mozos tienen instrucciones de tomarse atribuciones para preguntarle al público comensal por qué la comida no fue de su agrado, y según la respuesta trabajan con el cocinero para mejorar en la elaboración de ese plato. La Conga se caracteriza por tener una buena oferta de precios y platos generosos, pero también porque sus platos mantienen el auténtico sabor peruano, o sea brindan al público calidad y precio. Además, el local cuenta con un soporte de 2 cámaras frigoríficas, van 3 veces a más por semana a hacer las compras para los insumos que les demanda la gastronomía; los empleados están divididos en 2 y hasta 3 turnos; el primer turno entra a las 6 y 7 de la mañana, y luego los del mediodía a partir de las 13, y también hay un turno de noche.
Muchas felicidades amigos de La Conga, los éxitos son merecidos, gracias por haberme invitado a compartir con ustedes este aniversario.¡salud por estos primeros 10 años!









Unidos por la fe, y la limpieza


LA OTRA ESQUINA

Por Carlos Gallardo Guarniz


La directiva de la Hermandad del Señor de los Milagros en Buenos Aires ha decidido tomar el toro por las astas respecto al tema de la basura y de los ambulantes que, año tras año, se han convertido en un dolor de cabeza para los hermanos no habiendo forma de controlarlos ya que cada año, lejos de mermar en su número, los ambulantes se multiplican mezclándose con los fieles alrededor de la procesión. Vanos intentos se han hecho en años anteriores, pero también hay que decirlo, no se ha tomado la seria voluntad de encarar esta situación. Este año las cosas parecen ser distintas, pues para tal efecto el mayordomo general José Telenta y el secretario de organización Fidel Ato, convocaron a una conferencia de prensa el día 26 de septiembre en la sede de la Hermandad (iglesia La Piedad, Mitre y Paraná) para dar a conocer la organización del mes morado y la procesión del Cristo Moreno a realizarse el próximo domingo 28 de octubre por las calles de Buenos Aires; en dicha reunión con los hombres de prensa se puso énfasis en querer realizar una procesión limpia, y para ello ya está trabajando un grupo de voluntarios que se han unido a la directiva de la Hermandad con el propósito de colaborar en esta causa. Se trata de un grupo de compatriotas que ya tienen experiencia en esta labor, me refiero al colectivo “Elecciones Limpias”, que colaboraron eficazmente con el Consulado en la organización y en la limpieza de las elecciones presidenciales en segunda vuelta (junio de 2011). Su mismo patrocinador, Emilio Calderón, director de Gaceta del Perú, es el que ahora promueve este grupo de apoyo que se ha denominado “Unidos por la Fe”. Este ejército de voluntarios viene sosteniendo reuniones con la directiva de la Hermandad a fin de elaborar un plan de trabajo para que, al paso de la procesión, no quede ese vertedero de basura producido por esa mala costumbre de algunos –o tal vez muchos peruanos- de tirar a la calle los residuos de comida o la papelería de propaganda publicitaria que se distribuye ofertando uno y mil productos como si las veredas fueran un contenedor de basura al aire libre. Estos malos hábitos de los peruanos se ve reflejado como en un espejo en la procesión, donde a los creyentes les parece algo normal esta conducta de arrojar los residuos en las veredas porque nadie les dice nada, y sólo se podrá erradicar esta costumbre haciendo énfasis y campañas de educación para concientizar a la ciudadanía de que los desperdicios se tiran en los contenedores de basura; en fin, ya el hábito hecho costumbre –para bien o para mal- resulta muy difícil de erradicar en las personas, por eso la Hermandad ha decidido hacerle frente y para ello está solicitando el apoyo de la comunidad.
El llamado es principalmente a las empresas y organizaciones e instituciones de la colectividad para que se sumen en esta gesta por la limpieza. Así el grupo Unidos por la Fe principalmente requiere de 3 mil bolsas, 110 escobas, guantes y una movilidad para que ayude a trasladar los materiales por las calles porteñas donde haga su recorrido la procesión del Señor de los Milagros; también la convocatoria está abierta para aquellos voluntarios de a pie que se quieran sumar, se necesita unas 300 personas para ayudar en diferentes tareas para la limpieza.
A esta convocatoria, que es un grito desesperado de ayuda de la Hermandad y del grupo “Unidos por la Fe”, ya han respondido empresas como Argenper, que mandó a hacer los afiches del recorrido procesional, la Universidad ALAS Peruanas donó 300 polos o remeras para uniformar e identificar a los voluntarios; asimismo, la agrupación cultural Pukará ha puesto a órdenes de la Hermandad a un equipo de personas para colaborar en lo que sea necesario. Se espera que al correr de los días se vayan sumando más empresas para colaborar en esta campaña de limpieza durante el recorrido procesional.
Y con respecto a los ambulantes, la directiva de la Hermandad viene sosteniendo reuniones con algunos integrantes de agrupaciones de vendedores de la calle, los mismos que han mostrado voluntad de cooperar en la limpieza llevando bolsas de residuo para que allí depositen los desperdicios de comida los eventuales comensales. Hay que mencionar que la procesión no sería la misma sino estuviera acompañada por sus tradicionales dulces y potajes como el turrón, los picarones, tamales y anticuchos, por ejemplo. De modo que aquí de lo que se trata es de no erradicar sino de organizar a los ambulantes que expenden los platos típicos que son parte de la tradición del mes morado y de la procesión.
Por otro lado, la procesión del Señor de los Milagros es una de las manifestaciones religiosas de mayor expresión de los peruanos, convocando a una multitud de fieles todos los años en el mes de octubre, también conocido como mes morado por el hábito de este color que usan los fieles como atuendo en la procesión. Esta hermosa manifestación de fe del pueblo peruano se trasladó a la Argentina gracias a devotos que hoy ya no están entre nosotros, como Rosa Chabaneix, una de sus impulsoras –a quien tuve el gusto de conocer- que nos han legado esta devoción y que la ciudad de Buenos Aires nos permite realizar su culto como en nuestro país, por eso la responsabilidad de mantener limpia la ciudad que nos acoge es doble porque estamos en casa ajena, y debemos comportarnos como buenos huéspedes; sin embargo, en los últimos años la imagen que ha dejado la procesión ha sido cuestionada por el carácter comercial que ha estado teniendo, e incluso muchos fieles se han alejado no concurriendo a la procesión porque esta lejos de representar una manifestación de fe, predominaba el comercio ambulatorio y los fieles más pareciera que asisten a una pollada al aire libre como en una reunión social que a un devoción religiosa, porque hasta borrachos y todo se ha visto y cada vez en mayor número. Asimismo, los baños químicos no deberían estar ausentes, sino ubicados en lugares estratégicos.
En tal sentido resulta un acierto esta decisión de la directiva de la Hermandad del Señor de los Milagros de querer rescatar a la procesión de estos malos modales pueblerinos en que estaba cayendo y que ha sido la postal de los últimos tiempos en Buenos Aires. La procesión del Señor de los Milagros debe retomar el sendero de la fe, su espiritualidad, la fiesta del pueblo peruano expresada religiosamente, y para ello debemos trabajar y colaborar cada uno desde su lugar el día que acudamos a la procesión a profesar nuestra fe en el Cristo de Pachacamilla.
Y desde ya, para terminar, no estoy de acuerdo en que haya dos procesiones en Buenos Aires (una en Congreso, que este año alcanzará a las calles de Once, y otra en Flores, en derredor de la Plaza del mismo nombre. La procesión tiene que unir a los peruanos, no desunirnos en dos o más grupos antagónicos que comparten la misma fe en el Señor de los Milagros; y, las autoridades eclesiásticas, que deberían llamar al diálogo, no deben permitir estas divergencias, pero esto será materia de otro artículo.